
TOXINA BOTULÍNICA
El tratamiento con toxina botulínica para rejuvenecer rostro, consiste en infiltrar en la piel unas gotas de un líquido que contiene proteína natural purificada para eliminar las arrugas de expresión. Como no es un material de relleno, no elimina las arrugas mediante aporte de volumen, sino que actúa sobre los músculos relajándolos, lo que permite mantener una expresión natural.
La dosis de toxina botulínica que se administra es muy baja y no se acumula con los años, lo que significa que nuestro organismo la reabsorbe y la elimina por vía renal.
El resultado de la infiltración de la Toxina Botulínica se empieza a observar entre el tercer y quinto día y durante los primeros 15 se van eliminando las arrugas de forma progresiva. El rejuvenecimiento es evidente y la expresión facial queda más relajada.